SAN PEDRO SULA. Si alguien sabe nadar contra la corriente es Leonardo. No se rinde ni se deja desmotivar. Evidencia de ello son las impresionantes marcas que ha logrado en las albercas nacionales e internacionales donde ha practicado la natación.

Fruto de ello son alrededor de 300 medallas y 14 años de experiencia. Este imparable nadador nos demuestra que solo la perseverancia nos llevará al éxito y por tal razón, lucha incansablemente por lograr su segunda pasión y sueño, ser un destacado médico de Honduras.

Leonardo Enrique González Ávila (24), es nuestro tercer Puma de la Semana, estudiante de Medicina y apasionado deportista que desde los 10 años ha destacado en una disciplina tan exigente como la natación. 

Nacido en Tegucigalpa y criado en San Pedro Sula, el futuro médico se describe como un joven alegre, servicial y organizado.

“Es una persona entregada y amable, siempre está dispuesto a ayudar a los demás, es aplicado en sus estudios y sus actividades deportivas” dijo, su novia, Valeria Miselem.

La disciplina, la tenacidad y la determinación, son características que hacen de Leonardo un joven apto para cumplir cualquier meta que se proponga.

TRAYECTORIA

“Empecé a nadar a los diez años, en Rio Lindo, en las cataratas de Pulhapanzak, yo no sabía nadar y mi papá me tiró al río, tuve que nadar contra la corriente, y al final me sacaron por la orilla”, mencionó González.

Su fuerte son las carreras de 100 metros libres y a pesar de no recordar cuando ganó su primer encuentro, asegura que fue con el estilo antes mencionado.

Además, comentó que posee tres medallas de suma importancia para él, dos de los Juegos Centroamericanos realizados en el 2013 en Costa Rica, y una de los Juegos Deportivos Universitarios de Centroamérica y el Caribe (JUDUCA).

Gracias a su dedicación y empeño, nuestro talentoso puma ha logrado competir en diferentes países, entre ellos Costa Rica, Guatemala, Panamá, El Salvador, Nicaragua. Estados Unidos y Qatar mismos en los que ha representado al país y a su equipo con Delfines Sampedranos.

González afirmó con mucho orgullo que uno de sus logros más grandes, fue clasificar para el mundial de natación en el 2014 “solo enviaban a dos representantes, tuve que entrenar por tres anos para lograrlo”.

Asimismo, recalcó que la dificultad que todo nadador tiene, es la de batir sus propios tiempos.

“Practicar un deporte es una de las cosas más importantes que he hecho en mi vida, me ha mantenido fuera de los vicios, más que ser una disciplina completa, la natación me inculcó valores” afirmó el nadador.

Tenis, fútbol, atletismo y levantamiento de pesas son otros de los deportes que Leonardo ha practicado.

APRENDIZAJE

Dejando a un lado todos sus logros, Leonardo compartió en su declaración, lo que más le gustaba de la natación, declaró que sus compañeros fueron una parte fundamental en su formación y que aunque sea un deporte individual, la fraternidad siempre debería de estar presente.

Su padre, José Leonardo González, graduado de la máxima casa de estudios y especializado en Alemania, fue un excelente nadador que aparte de entrenar a nuestro deportista desde los 14 anos, también entrena a la selección de natación en Honduras.

“Mi inspiración siempre han sido mis papás, yo los he visto como se han superado y por eso yo nunca me he rendido, de igual manera Dios es una parte fundamental, si nos encomendamos a Él todo propósito será cumplido” manifestó González.

Al igual que a su padre, el deseo de Leonardo es que todos los niños practiquen al menos un deporte, que no dejen de soñar y que no desesperen que todo sucederá al tiempo de Dios.

VOCACIÓN
Desde pequeño soñó con ser doctor, inició en Ingeniería Civil, y al confirmar que esa no era su vocación, cambió de carrera y actualmente dedica mucho tiempo a su formación académica.

Leonardo está por iniciar su séptimo año de Medicina, previo al del seguro social, expresó que llaman su atención tres especialidades; salud pública, neurología y neumología.

“El logró balancear sus estudios con sus entrenamientos, ha demostrado que si se pueden hacer ambas cosas a la vez, todo es cuestión de actitud”, comentó Nélida Ávila, madre del futuro galeno.

No cabe duda que este joven perseverante ha cumplido muchos de sus objetivos con la ayuda de la responsabilidad, el esfuerzo y la dedicación mismos que nos pueden brindar resultados positivos y oportunidades que nos pueden cambiar la vida.

Para Leonardo renunciar a nuestros sueños no es una opción.

¡LEONARDO, TE DESEAMOS LO MEJOR!

Escrito por: Victoria Rico.

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