Por Katherine Eunice Ramirez Rivas, Presencia Universitaria
Según proyecciones económicas, este mes de agosto cerrará con 600 mil empleos perdidos, lo que equivale al 17.14 % de la Población Económicamente Activa (PEA), es decir alrededor de 3.5 millones de personas desempleadas en el país producto de la pandemia del COVID-19 que mantiene en confinamiento desde hace más de seis meses a la población hondureña.
Y de acuerdo a estimaciones de la Secretaría del Trabajo, se cuentan más de 800 negocios y empresas se han visto en la obligación de cerrar, lo que el experto en el ámbito empresarial, Nelson Durón, cataloga como una época difícil para el sector empresarial en diferentes sectores como micro, pequeña, mediana y gran empresa.
A su parecer, han sido más de cinco meses complejos para la empresa y sociedad en general, que aún lo vivimos inclusive quienes continúan en marcha con un negocio y que han tratado de sobrellevar su emprendimiento frente a una “reducción busca en la actividad económica y hasta cierto punto un tiempo inesperado para la sociedad, y en especial para las empresas, con un cierre repentino”, comentó Durón.
El Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) mide el valor de las producciones y en ese sentido, en el comparativo de Centroamérica, Honduras es el más afectado con un porcentaje arriba del 9% en rubros como el café, industria manufacturera y textiles.
Durón señaló que las actividades más afectadas son la industria manufacturera, comercio, construcción privada, sector turismo con sus hoteles y restaurantes; el transporte y almacenamiento. “Pero también hemos visto cómo algunas industrias han tenido números positivos, son muy pocas, pero hay, y son el área de comunicación, la intermediación financiera y supermercados”.
Asimismo, de acuerdo a un estudio realizado en el mes de mayo por el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES), el 77% de las microempresas dejó de percibir ingresos en los meses de marzo y abril, en un 65% la pequeña empresa, en un 33% mediana y gran empresa, lo que conlleva a las suspensiones laborales afectadas de igual forma.
Supervivencia
El experto en economía recomendó tres aspectos para que las empresas puedan seguir subsistiendo, además de incluir la digitalización, que durante esta pandemia se ha convertido en un tema fundamental para que las empresas puedan sobrevivir.
Como primer punto es que las empresas deben incluir un plan de ahorro de la empresa, enfocándose en ahorrar, por ejemplo, con los equipos y su uso de forma racional. “Es imperativo para toda organización de cualquier nivel”, recomendó.
En segundo lugar, deben desarrollar un plan de marketing. “Nadie puede adivinar el futuro, pero sí podemos crear un plan de marketing basado en nuestra experiencia y en nuestros conocimientos en el sector que estamos inmersos en la organización”, añadió. También si algunas personas empiezan sus negocios y aún no cuentan con conocimientos en su rubro, pueden unirse a organizaciones de desarrollo empresarial sin fines de lucro como la Cámara de Industria y Comercio Tegucigalpa (CICT).
Y como tercer y último consejo, “Tenemos que hacer un diagnóstico empresarial para saber dónde estamos parados, qué es lo que nos duele, qué es lo que nos está afectando y qué medidas potenciales podemos tomar, y estas organizaciones como la Cámara de Comercio pueden ayudarnos”.
Estos tres puntos anteriores deben ir de la mano con la reinvención de la empresa, digitalización y el modelo de negocios. “Las empresas tienen que comenzar a aprender a vender a través de las redes sociales y nuevos canales que existen para dar a conocer los productos, reforzar el posicionamiento de la marca y el fortalecimiento operativo, este último se trata de enfocar en todo lo que me va a reducir los costos, innovar en productos y sobre todo la logística de organización para hacer llegar producto al cliente, que son esenciales para sobrevivir”.
Panorama
En el contexto actual con más de cinco meses de pandemia de COVID-19 que ha mantenido a la población en aislamiento social, muchas empresas se encuentran cerradas o vendiendo sus productos mediante entregas a domicilio, así como otras reinventándose para ofrecer lo necesario al cliente en medio de un confinamiento.
En ese sentido, Durón manifestó que las empresas se encuentran siendo facilitadoras del proceso de compra de sus clientes y esto no va cambiar, aunque se termine un aislamiento social, porque las personas se acostumbraron a tener su producto en la puerta de su casa con solo presionar un clic.
Con lo anterior, el panorama futuro de los nuevos negocios es que deben “ser flexibles, cambiar rápidamente o adaptarse, y si no eliminar lo que no funciona, porque todo esto de la pandemia está haciendo que las empresas contengan elementos como la agilidad”, comentó.
Y un último elemento importante es la estabilidad. “Tenemos que ver desarrollar los tres puntos anteriores, trabajando de manera inteligente y ver cómo se logra la estabilidad, aunque sea dentro de toda esta tormenta que estamos viviendo; esto le brinda un tiempo mayor de sobrevivencia a la empresa”, puntualizó el experto en el ámbito empresarial.
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