Una de las mujeres hondureñas que se ha destacado a través de su labor profesional en el mundo del protocolo, y que se ha convertido en una de las voces prodigiosas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), es la periodista Gabriela Midence Hernández, al desempeñarse como maestra de ceremonia por más de 21 años en la institución, trayectoria que le ha permitido dirigir más de 400 eventos internacionales, nacionales, como las añoradas graduaciones, donde miles de egresados de la Máxima Casa de Estudios festejan su mayor logro académico.  

Hija de la abogada Mercedes Hernández de Midence (QEPD) y de don Wilfredo Midence (QEPD), esta admirable universitaria nos relató que actualmente está casada y es madre de una hermosa niña de 7 años, Sofía Gabriela.

Amplió, que sus funciones como maestra de ceremonia en la UNAH, desde su rol como mujer no ha sido nada fácil, ya que le ha tocado dirigir eventos importantísimos como la visita de la Reina Leticia de España en el año 2015, la visita de destacados científicos como el doctor Sir Salvador Moncada y la doctora María Elena Bottazi, escenarios que demanda de los más altos grados de concentración, seriedad y solemnidad.

Asimismo, le ha tocado liderar el recibimiento del director de la Real Academia Española, Darío Villanueva Prieto, del director del Alto Consejo de Evaluación de la Investigación y la Educación Superior (Hcéres, por sus siglas en inglés), como la visita de varios embajadores, miembros del cuerpo diplomático en el país, ministros, diputados y hasta presidentes de la nación.

Por otra parte, se ha desempeñado como maestra de ceremonia en los actos protocolarios de los Juegos Deportivos Universitarios Centroamericanos (Juduca), el Festival Interuniversitario Centroamericano de la Cultura y Arte (FICCUA) y uno de los eventos más trascendental para la vida de la UNAH, y que contó con la asistencia de más de 7,000 espectadores, fue la inauguración del Complejo Deportivo Universitario (CDU), mejor conocido como el “Polideportivo de la UNAH”.

“Recuerdo que cuando se inauguró el Polideportivo fue uno de los eventos que me generó mucha tensión por la avalancha y aglomeración de personas que buscaban ingresar a las instalaciones de cualquier manera, yo estaba estresada por mi embarazo, me preocupaba la salud de mi hija, sin embargo, tuve que ser fuerte, profesional, recuerdo que al mencionar el nombre de la exrectora Julieta Castellanos en el público se podía escuchar una fuerte algarabía”, narró Midence.

Gabriela resaltó que labor de las mujeres hondureñas se vuelve aún más complicada, debido que como mujeres les toca asumir varios papeles a la vez: su rol de madre, hija, esposa y jefas del hogar, escenario donde la palabra descanso no existe.

“Yo ingresé a laborar en la UNAH un 8 de febrero de 2002, bajo la administración de la rectora Ana Belén Castillo, luego de realizar mi práctica profesional en la Dirección de Desarrollo Estudiantil (DIDE) oficina que ahora conocemos como VOAE, la persona que me incursiona como maestra de ceremonia en la UNAH fue el maestro Agustín Lagos, con quien estaré agradecida toda la vida, él en ese entonces me dijo -contas con una buena voz y talento para desempeñarte como maestra de ceremonia- mis primeros eventos fue en la unidad que se conocía como Extensión Universitaria, al principio estuve trabajando ad honorem por más de un año”, expresó Midence.

Agregó: “Además, me ha tocado acompañar diferentes autoridades universitarias, con quienes hemos establecidos muchos lazos de amistad, durante esta época he vivido, junto a un gran equipo de trabajo, momentos de alegría como de tristeza, han sido muchos años de experiencia, de mucha satisfacción, pero también de muchos sacrificios, dentro de los logros como equipo es que muchas secretarias de Estado y diferentes instituciones del país nos buscan como referentes y eso representa que estamos haciendo las cosas bien”.

Ceremonias de Graduaciones

Por otra parte, contó que uno de los eventos que a ella le encanta dirigir son los actos de graduaciones públicas de la UNAH tanto en Ciudad Universitaria como a nivel de Centros Regionales. 
"He participado en alrededor de unas 400 graduaciones, eventos académicos, culturales, deportivos, conferencias de prensa, homenajes póstumos, recibimientos de personalidades, entre otras actividades".

Respecto a los actos de graduación destacó que la Alma Máter siempre ha buscado estar a la vanguardia, razón por la que año con año se han ido entrando en proceso de mejora continua.

Relató que cuando a ella le tocó dirigir sus primeras graduaciones estas se realizaban en el Anfiteatro del ahora Centro de Información y de Servicios Estudiantiles (CISE), cuando los jóvenes tenían que recibir sus títulos universitario bajo la intemperie, pero que posteriormente posteriormente se tomó la decisión de trasladarlas al auditorio central Juan Lindo con el fin de brindar un mejor servicio a los nuevos profesionales.

Como parte de esa actualización protocolar, Midence resaltó años después se propuso que las graduaciones de la UNAH mejor se efectuaran en el Palacio Universitario de los Deportes, con el fin que los graduados contaran con instalaciones de primera.

Amplió, que de los momentos más emotivos en cada ceremonia de graduación son la entrega de títulos a los estudiantes con discapacidad, que cuando ellos pasan a recibir su diploma al estrado siempre le pide al público que le rindan un sonoro aplauso.

Entre los momentos triste que le ha tocado enfrentar son la entrega de los títulos post mortem. “Esto a mí me parte el corazón al ver que los familiares del estudiante que ya falleció pasan al estrado a recibir el título de su hijo o hija, padre o madre, sin embargo, me toca ser fuerte porque me toca continuar con la dirección de la ceremonia”.

Otra de las anécdotas que Midence recuerda es cuando tuvo que grabar un mensaje de felicitación para un joven quien le admiraba por su voz. "Iba en el ascensor y veníamos platicando con un compañero y en eso, una muchacha me preguntó que si yo era la maestra de ceremonias de las graduaciones de la universidad y que si podía grabar un audio felicitando a su novio por su cumpleaños, ya que él le había comentado que le encantaba su voz. Me rogó tanto que al final terminé accediendo para felicitarlo", detalló mientras sonreía.

“En este día de la Mujer Hondureña quiero enviar un mensaje: nosotras las mujeres somos sinónimo de fortaleza, de valentía, somos la creación más hermosa de Dios. Las mujeres hemos evolucionado en todos los aspectos de la vida y lo estamos demostrando a nivel internacional como a nivel nacional, actualmente estamos alcanzando una amplia participación a nivel político, económico y social”, manifestó la maestra de ceremonia de la UNAH.