Periodista Elin J. Rodríguez
Tras 10 años sin registrarse una ceremonia de graduación en el auditorio central Juan Lindo, este día fue el recinto donde la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) tituló, mediante graduación privada, a 43 nuevos profesionales de cinco facultades, de los cuales 34 concluyeron su carrera con mención honorífica.
En el acto se graduaron profesionales de ocho licenciaturas y tres maestrías de las facultades de Ciencias Económicas, Administrativas y Contables, Ciencias Sociales, Ciencias Médicas, Ciencias Jurídicas y Odontología. Además de las carreras de grado, la Máxima Casa de Estudios les extendió título a tres nuevos másteres.
La ceremonia estuvo a cargo de la rectora por ley, Lourdes Murcia, titular de la Vicerrectoría Académica, quien tomó el juramento a los graduandos y les instó a seguir preparándose y a no olvidarse de su Alma Máter. Además, destacó el número de menciones honoríficas, con lo que, según la académica, se identifica el sello de calidad que la UNAH implementa en cada uno de sus procesos académicos.
“Como universidad, tenemos un compromiso con nuestros egresados de entregarles su título lo más ágilmente posible; por ello retomamos las ceremonias privadas, ya que no pudieron graduarse en marzo ni en junio, y no quisieron esperar hasta septiembre”, dijo Alexander Ávila, secretario general de la Máxima Casa de Estudios. El funcionario recordó que en el auditorio central Juan Lindo no se realizaba una graduación desde 2015.
Además, enfatizó que la Máxima Casa de Estudios, más que entregar un título, está entregando al país profesionales con altas capacidades que pueden resolver los problemas que hoy enfrenta el país.
“Este título no es solo mío, es un logro para mi familia. Gracias a la UNAH que ha sido mi casa durante tantos años; estaba ansiosa por mi título, no quería esperar más, ya que pienso seguir estudiando y aplicaré al posgrado de cirugía”, dijo Diana Gisell Carías, doctora en Medicina y Cirugía.
Las lágrimas también estuvieron presentes; Clara Isabel Sosa Rovelo, graduada de la Licenciatura en Enfermería, junto a su madre Osiris Rovelo, se fundieron en un abrazo prolongado, ambas ahora son profesionales de la enfermería.
“Estoy orgullosa y bendecida por este éxito, que esperamos sea uno de muchos, y ahora que dé lo mejor a este país y a la población que se lo merece”, dijo doña Osiris.
“Seguí los pasos de mi madre porque es mi modelo a seguir; siempre estaré orgullosa de ella”, dijo Clara sin esconder la emoción por el título y el agradecimiento hacia su madre.
De los 34 graduados con mención honorífica, 24 se titularon con Cum Laude y 10 con Magna Cum Laude.
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