Por: Monserrat Montalván
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) Campus Choluteca, en colaboración con la Agencia Adventista para el Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA), está ejecutando el proyecto Desarrollo del Cultivo en Etapa Piloto de la Espirulina (Spirulina s.p.) como complemento alimenticio para los hogares de escasos recursos del Canal Seco, en la zona sur de Honduras.
Esta iniciativa tiene como objetivo fortalecer la seguridad alimentaria y mejorar la nutrición en comunidades vulnerables mediante la transferencia de tecnología y el cultivo sostenible de este superalimento.
Como parte del proyecto se han llevado a cabo diversas actividades de capacitación y transferencia tecnológica en las comunidades de Las Casitas, Las Marías de San José y Choluteca, beneficiando a 40 familias. A través de estas acciones, los participantes han aprendido técnicas de producción y aprovechamiento de la espirulina, una microalga altamente nutritiva que representa una alternativa accesible para combatir la desnutrición en la región.
Reconocida por su alto contenido de proteínas, vitaminas y minerales esenciales, la espirulina se ha convertido en un complemento ideal para mejorar la dieta de familias de bajos recursos. En este sentido, ADRA y el Departamento de Acuacultura y Biología Marina de la UNAH Campus Choluteca han establecido unidades demostrativas para su cultivo, proporcionando a la comunidad conocimientos prácticos sobre su producción, procesamiento y consumo.
Para reforzar la apropiación del proyecto, recientemente se llevó a cabo una feria gastronómica en la que los habitantes de las comunidades beneficiadas pudieron degustar distintos platillos elaborados con espirulina como suplemento. Entre las preparaciones destacaron licuados, panqueques, productos de repostería y tortillas fortificadas, demostrando la versatilidad de este superalimento.
El proyecto sigue avanzando con la participación de líderes comunitarios y beneficiarios directos, quienes han mostrado gran interés en replicar esta iniciativa en otras zonas del sur del país. Se espera que los conocimientos adquiridos impulsen la expansión del cultivo de espirulina como una estrategia clave para combatir la inseguridad alimentaria en Honduras, resaltando la importancia de la vinculación entre la universidad y las comunidades para fomentar el desarrollo local a través de soluciones innovadoras.
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