Secretario de SEDI: UNAH recibirá más de mil millones de lempiras para ejecutar el programa Mi Bienestar UNAH

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Por Kelssin Vásquez

La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) recibió una buena noticia que beneficiará a miles de jóvenes hondureños: La Secretaría de Finanzas aprobó más de 1,000 millones de lempiras para financiar el programa Mi Bienestar UNAH, estrategia institucional orientada a mejorar las condiciones académicas y de vida de estudiantes de bajos ingresos.

La referida información fue confirmada por el titular de la Secretaría de Desarrollo Institucional (SEDI), máster Oziel Fernández, y el director de Planificación, Javier Martínez a Presencia Universitaria en el marco del Segundo Consejo de Planificación que se realiza en UNAH Campus Olancho, quienes destacaron que esta asignación extraordinaria permitirá beneficiar directamente a la comunidad estudiantil a partir de este año.

De acuerdo con las autoridades universitarias, este apoyo presupuestario representa un hecho sin precedentes y forma parte de los esfuerzos de la administración por “humanizar el presupuesto” y garantizar que la educación superior llegue a más hondureños, especialmente a quienes se encuentran en condiciones económicas delicadas.

Fernández subrayó que la universidad atraviesa una etapa positiva: actualmente cuenta con 64,460 estudiantes activos y más de 70 mil estudiantes considerando las modalidades virtuales, cifras que evidencian una recuperación sostenida en la tasa de crecimiento tras el impacto de la pandemia y la migración.

Los fondos aprobados permitirán otorgar becas alimenticias, de transporte, conectividad y materiales didácticos, vinculando estos apoyos al rendimiento académico y a la situación socioeconómica de los estudiantes. Se informó, además, que el presupuesto ya fue cargado oficialmente en el Sistema de Administración Financiera (SIAPI) y que la Vicerrectoría de Orientación y Asuntos Estudiantiles (VOAE) será la unidad ejecutora del proyecto.

¿Qué es mi bienestar UNAH? 

Transformar la vida universitaria, poniendo en el centro a cada miembro de la comunidad y fomentando una universidad más humana e incluyente, es la apuesta de la UNAH. Para lograrlo, lanzó el programa Mi Bienestar UNAH, una iniciativa integral que forma parte de la visión del rector Odir Fernández desde antes de asumir el liderazgo de la institución.

Esta iniciativa pretende construir una red de apoyo que garantice acceso equitativo a alimentación, transporte, conectividad, atención médica y psicológica, y espacios de cultura, deporte y convivencia. “Es una manera de decirle a cada universitario: ‘no estás solo’”, resaltó el rector.

El programa involucra a toda la comunidad universitaria y se implementará en todos los campus durante los próximos dos años. Su diseño surgió tras un diagnóstico revelador: el 65 % del núcleo familiar universitario vive con menos de 20 mil lempiras al mes, el 55 % de los estudiantes piensa en migrar y más del 20 % enfrenta ansiedad o depresión. Estas cifras llevaron a las autoridades a replantear estrategias que atiendan las necesidades de estudiantes, docentes, personal administrativo y de servicio.

Su lanzamiento fue en junio de este año, pero ya se había comenzado a materializar con espacios como la Estancia Infantil Pumitas del Futuro, el Comedor Universitario y el Coworking Lucem Aspicio, que se ampliarán a todos los campus. También se fortalecerán áreas como salud, tecnología y la Librería Universitaria, pilares clave para mejorar el bienestar.

Un enfoque institucional y progresivo

Por su parte el titular de la Secretaría Ejecutiva de Desarrollo Institucional (SEDI), amplió que el programa cuenta con una hoja de ruta elaborada con el apoyo del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS), basada en un diagnóstico participativo. Este trabajo, que se desarrolla en etapas, permitirá entender la realidad desde la voz de sus protagonistas.

En 2026 iniciarán intervenciones específicas para cada grupo y en 2027 se consolidará una política institucional con normativas que aseguren la continuidad del programa, más allá de los cambios administrativos. La implementación comenzará en Ciudad Universitaria y los campus de Cortés y Atlántida, y se extenderá progresivamente a los demás centros.

Diagnóstico integral y participativo

La primera fase del programa se centra en conocer a profundidad las necesidades de la comunidad universitaria, por lo que más de 40,000 estudiantes participaron en una encuesta inicial. Según Héctor Figueroa, director del IIS, el diagnóstico se divide en tres etapas: la primera enfocada en estudiantes, la segunda en docentes y la tercera en personal administrativo y de servicios.

La meta es tener los tres diagnósticos listos al cierre de 2025 para iniciar en 2026 la fase de implementación con soluciones específicas para cada grupo.

Acciones concretas y sostenibles

Entre las medidas se contempla otorgar apoyos económicos directos a estudiantes en situación de vulnerabilidad, cubriendo necesidades como alimentación, transporte, materiales y conectividad. También se fortalecerá la atención en salud mental y el acompañamiento psicoeducativo, a través de unidades multidisciplinarias en cada campus.

Además, se implementará un sistema de seguimiento institucional a becarios, basado en criterios de equidad, mérito y transparencia. Se promoverá también la equidad territorial y educativa entre los ocho campus, asegurando condiciones mínimas de bienestar para el aprendizaje.

“Es un proyecto sin precedentes”, subrayó Oziel Fernández, ya que por primera vez en Honduras y la región se pone en marcha un programa que prioriza las necesidades urgentes de su comunidad, asegurando que el presupuesto se destine en beneficio de estudiantes, docentes y personal administrativo y de servicio.