Por Hugo Duarte
Con entusiasmo, energía y una actitud positiva, los niños y jóvenes participantes de la primera edición de la Escuela de Verano cerraron esta experiencia con broche de oro, disfrutando de una clase especial "plus", llena de juegos, dinámicas recreativas y actividades deportivas, donde pudieron demostrar su talento y pasión por la actividad física.
En esta jornada final destacó no solo el entusiasmo, sino también la disposición para aprender. Bajo la guía de docentes y estudiantes universitarios, los futuros "pumitas" compartieron, se divirtieron y reforzaron lo aprendido durante tres semanas dedicadas a la ciencia, el arte y el deporte.
Las actividades lúdicas realizadas fomentaron el desarrollo cognitivo y físico de los jóvenes, al tiempo que fortalecieron habilidades sociales y promovieron la sana convivencia. El escenario de estas jornadas fue el Complejo Deportivo Universitario, un espacio equipado con áreas adecuadas para la práctica segura y eficiente de disciplinas deportivas.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) reafirma con este proyecto su compromiso de apertura hacia la comunidad estudiantil de nivel medio, brindando espacios formativos donde ciencia, arte y deporte se integran en una experiencia educativa significativa. Esta iniciativa marca el inicio de una nueva etapa en la historia de la Máxima Casa de Estudios del país.
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