Periodista: Yuri Vargas
El experto argentino en Derecho del trabajo, David Duarte, brindó este miércoles 19 de marzo, en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), una conferencia magistral en torno al daño moral y psicológico en las relaciones laborales.
Como parte de su disertación en dicho espacio organizado por la Maestría en Derechos Humanos, adscrita a la Facultad de Ciencias Jurídicas (FCJ-UNAH), el jurista y profesor universitario resaltó que si bien es cierto este tipo de daño no figura en la normativa laboral ni de Honduras ni del resto de países de América Latina, sí está contemplado tanto en la Constitución de la República como en los tratados internacionales.
“Hay aspectos de la persona que no se agotan con la prestación del servicio, sino que tienen que ver su vida, es decir, estamos hablando de un ser humano, y si bies es cierto no están en el ordenamiento jurídico de la legislación laboral, sí están en la Constitución política de Honduras, en los tratados internacionales de Derechos Humanos, porque el trabajador antes de ser trabajador es un ser humano y como ser humano tiene derecho a la protección de su integridad psicofísica”, expresó.
El conferencista resaltó que cuando hay una afección psicológica, esta debe ser reparada y el juez de lo laboral tiene que aplicar los principios establecidos en las normativas antes mencionadas, puesto que la afectación no solo es para el trabajador, sino también para su familia, y se manifiesta de diferentes maneras, de forma temporal o permanente.
“El cambio de paradigma es bajar los tratados internacionales de Derechos Humanos incorporados en nuestros países, a través de los textos constitucionales, porque son normas que tienen ese rango y deben prevalecer frente a la legislación laboral”, acotó.
Por su parte el abogado Lee Ramírez, coordinador del posgrado organizador de la ponencia, resaltó que la temática abordada está en boga tanto a nivel de doctrina como de los órganos jurisdiccionales, como parte de esa búsqueda de respuestas ante la inobservancia o falta de tutela de estos derechos en materia laboral.
“Lo que pretendemos es evidenciar que como seres humanos estos derechos y garantías están incorporados y los efectos dañinos al individuo como persona derivados de un despido arbitrario, de la terminación unilateral de una relación de trabajo de forma abusiva, no se encuentran tarifados, lo que lleva al juez de instancia a desestimar el reclamo porque dice no tener competencia, pese a que ese daño moral y psicológico debería ser reparado de forma integral”, expuso.
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