Periodista: Daniela Martínez
La Mini Expoferia realizada en UNAH Campus El Paraíso llegó a su última entrega con los proyectos desarrollados en las clases del ingeniero Víctor Núñez, donde los estudiantes exploraron el potencial de los alimentos y los desechos agroindustriales para generar productos útiles, saludables y sostenibles. Desde la cocina tradicional hasta la gestión inteligente de residuos, estas propuestas mostraron cómo la ciencia puede convivir con la vida diaria y transformarla.
Los estudiantes Beatriz Bustillo, Alicia Paguaga y Julio Avilés presentaron un consomé natural elaborado a base de tomate, chile, cebolla, ajo, aceite y un toque de laurel, enriquecido con pechuga de pollo. Su principal distintivo es lo que no contiene: glutamato de sodio, un aditivo común en los consomés comerciales y que suele asociarse con problemas de presión arterial y otros riesgos. El resultado es un producto más limpio, más accesible y con un perfil de sabor que nace de ingredientes reales.
Por su parte, Alexandra Ardón y Ángel Tercero desarrollaron una mermelada de piña con albaricoque. La piña aporta intensidad y frescura, mientras que el albaricoque equilibra con un sabor suave y una textura que redondea la mezcla. El resultado es una combinación en la que ambas frutas conviven sin competir, potenciando sus propiedades naturales.
En la línea de aprovechamiento de desechos agroindustriales, Keyrin Amador y Ángel Morazán presentaron un abono orgánico elaborado a partir de cáscaras de piña. En este proceso, las lombrices transforman los residuos en un material más estable y rico en nutrientes. Este tipo de abono mejora la calidad del suelo y ofrece una alternativa práctica y sostenible frente a los fertilizantes químicos.
Con estos proyectos culmina la Mini Expoferia, una actividad que permitió a los estudiantes experimentar, crear y presentar ideas con impacto real. Se agradece a los estudiantes que participaron y a los docentes que guiaron cada proceso con dedicación.
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