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Por: Esdras Díaz Madrid
La Escuela de Microbiología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) ha iniciado oficialmente el proceso de autoevaluación con fines de acreditación de la carrera, reafirmando su compromiso con la mejora continua de la educación superior en el país. Silvia Pineda, directora de esta Escuela, destacó que el proceso representa un esfuerzo significativo que ha sido una prioridad institucional durante mucho tiempo.
En ese sentido realizaron la referida jornada de sensibilización y socialización en el auditorio Jesús Aguilar Paz, en Ciudad Universitaria, en la misma participó una nutrida cantidad de estudiantes y autoridades de la carrera.
“Desde el 2003 luchamos siempre por la mejora continua, hemos hecho cuatro esfuerzos por autoevaluarnos y lograr finalmente una acreditación, lastimosamente el problema ha sido la parte financiera”, explicó Pineda.
Sin embargo, aclaró que, con el respaldo de las nuevas autoridades universitarias, la Escuela ha retomado el proceso. “Este año ellos han dado respuesta y estamos con la confianza de que así va a ser, esperamos que en noviembre puedan visitarnos los pares evaluadores de la agencia acreditadora”, añadió Pineda.
Para las autoridades, la autoevaluación es un proceso clave que permite analizar fortalezas, debilidades y definir planes de mejora y consideran este paso como fundamental para consolidar un perfil profesional de calidad. “La acreditación genera confianza porque todos los procesos que se desarrollan dentro de la carrera están bien fundamentados. Trabajamos con base en necesidades reales”, recalcó la directora.
Además del fortalecimiento académico, la acreditación trae beneficios concretos para los estudiantes. “Se sabe que una carrera acreditada tiene sostenibilidad en todos los aspectos, y eso da una mayor apertura en el campo laboral para nuestros egresados”, afirmó.
Rediseño curricular
Paralelamente al proceso de acreditación, la Escuela de Microbiología espera la aprobación oficial de un nuevo plan de estudios, en ese sentido, dijo que el rediseño curricular ha sido trabajado desde el año 2019, con el objetivo de actualizar y unificar la formación académica bajo un nuevo enfoque.
Entre los cambios más significativos está la transición del sistema trimestral a uno semestral, y la consolidación del título bajo un nuevo nombre, “Antes trabajábamos con diferentes énfasis: clínico, industrial... pero ahora hemos visto que un microbiólogo puede desempeñarse en cualquiera de los campos”, detalló Pineda.
El nuevo plan también contempla mejoras en la infraestructura y el equipamiento académico. Aunque se solicitó la construcción de un nuevo edificio, se ha prometido el cierre y adecuación del ala del edificio J1 como primer paso. “Esperamos que, una vez aprobado el plan, se analice la disponibilidad financiera para determinar cuándo podríamos comenzar a implementarlo”, agregó.
La directora finalizó reiterando la importancia del trabajo que se está realizando: “Ha sido un trabajo duro, arduo, somos un equipo grande, pero con la fe y la esperanza de que sí lo vamos a lograr”, dijo finalmente.



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