La solidaridad y creatividad de los otros héroes de la patria: los maestros

Por Nadia Marcela Mendoza, Presencia Universitaria

La pandemia por el COVID-19 ha provocado que muchos profesionales deban reinventar sus formas de trabajo, lo que ha conllevado un mayor sacrificio, responsabilidad y creatividad, como es el caso de los maestros, quienes aún bajo niveles de estrés y desgaste emocional han liderado el sistema educativo en el país.

En Honduras casi tres millones de estudiantes, entre primaria, secundaria y educación superior, se han visto obligados a recibir clases bajo la modalidad virtual y, por ende, sus maestros han tenido que ingeniárselas para mantener activo el sistema educativo, siendo creativos, responsables y solidarios.

“Los docentes estamos experimentando una crisis global de aprendizaje, pues aun cuando en la escuela no se estaban adquiriendo habilidades fundamentales necesarias para la vida, el indicador de pobreza de aprendizajes se ha presentado un poco más por la actual situación”, indicó la doctora Dora Díaz, investigadora y docente de la Carrera de Pedagogía.

Desafíos

De acuerdo con la académica, antes de la pandemia se reflejaba que el 53% de los niños de 10 años en Honduras no podían comprender un texto simple y ahora, con este confinamiento, el reto para los maestros es potencial, quienes han jugado un importante papel, demostrando liderazgo pedagógico para mantener activo el sistema educativo en Honduras, sacando a flote la creatividad y solidaridad, y siendo los actores principales para motivar a sus estudiantes.

Para la investigadora, el rol del docente ha sido fundamental en esta pandemia, ya que además de continuar con sus actividades de forma virtual, también han mantenido una comunicación afectiva con sus alumnos, padres de familia, comunidad e incluso, en algunos casos, con las alcaldías.

“El desafío que enfrenta el docente actualmente es reducir al máximo ese impacto negativo que tiene la pandemia… ha sido una ruta acelerada que el docente ha tenido que liderar con sentido de responsabilidad, comprensión, con la urgencia y necesidad de atender el sistema”, expresó la pedagoga.

Carencias

Los profesores, en los últimos seis meses, se han enfrentado a un escenario sumamente complejo, donde sus principales herramientas de trabajo han sido los medios virtuales, viéndose obligados a incrementar su creatividad para buscar alternativas de enseñanza, ya que únicamente el sistema de educación superior cuenta con plataforma virtual, y sumado a esta carencia, la situación se agudiza más en aquellas zonas, principalmente rurales, donde no todos tienen alcance a medios virtuales.

Por su parte, la Secretaría de Educación en los últimos meses se ha dispuesto a crear programas radiales y televisivos, sin embargo, quien tiene el rol para manejar la complejidad que conlleva la virtualidad de forma forzada es el docente quien, de acuerdo con Díaz, está viviendo estrés y desgaste emocional.

Enseñanzas

Según la académica, un aspecto positivo que está dejando esta pandemia, además de impulsar el liderazgo pedagógico, es el involucramiento de los padres de familia en el proceso de enseñanza aprendizaje.

Asimismo, manifestó que una de las lecciones aprendidas para el sistema educativo es la necesidad de contar con una plataforma paralela, es decir un sistema alternativo para casos de emergencia como el actual.   

Panorama próximo

Díaz explicó que este año lo que el docente ha procurado es mantener activo el proceso educativo, y para el próximo año la Secretaría de Educación tendrá que desarrollar espacios para que el maestro pueda capacitarse, así como evaluaciones para los alumnos, de manera que se puedan retroalimentar.

“El proceso de enseñanza va acompañado de habilidades y destrezas, pues la currícula es tanto práctica como teórica, por lo que para las metas cognitivas de aprendizaje de los estudiantes se tendrá que tener un programa de nivelación el próximo año, por lo que necesitará una propuesta tanto afectiva como curricular”, concluyó.