Flacso presentó estudio sobre funcionalidad y salud mental en hogares de familias migrantes

 Por Nadia Marcela Mendoza, Presencia Universitaria

Como parte del lanzamiento de la colección: Migración y Desarrollo, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso-Honduras) presentó el estudio "Funcionalidad familiar y salud mental: encargados de hogar y adolescentes de familias migrantes (familia fragmentada) en la zona de influencia del Centro Integral de Salud de Villanueva (CIS-V), Tegucigalpa”.

El objetivo fue determinar la situación de salud mental y funcionalidad familiar asociada a la migración en familias fragmentadas que viven en la zona de influencia del Centro Integral de Salud de Villanueva, Francisco Morazán, tomando una muestra de 325 hogares de cuatro sectores marginales de la referida colonia.

En ese sentido, se identificó la cantidad de familias fragmentadas, es decir, hogares en los que un miembro ha migrado, y el resultado indicó que 55 de las 325 familias reportaron un familiar migrante y las principales causas de estas migraciones fueron violencia e inseguridad, desempleo, pobreza y familiares viviendo en los Estados Unidos.

Resultados

Un dato relevante que arrojó el estudio es que un porcentaje significativo, tanto de adolescentes como adultos de familias fragmentadas y no fragmentadas, presentan ansiedad y depresión. De acuerdo con la investigación, la prevalencia de ansiedad en adultos y adolescentes de familias fragmentadas fue de 85% y 91%, respectivamente, y este porcentaje fue similar en adultos y adolescentes de familias no fragmentadas, con un 87%.

Al realizar una comparación entre las familias fragmentadas y las no fragmentadas, y con base en los datos obtenidos en el estudio, se concluyó que las familias fragmentadas tienden a tener un mayor número de miembros en el núcleo familiar.

Otra conclusión que dejó la investigación es que las estructuras de soporte del adolescente y el reconocimiento del nivel de autoridad y jerarquía son menores en comparación a las familias no fragmentadas, y respecto a la educación, hay diferencias marginalmente significativas en contra de familias fragmentadas, pues se indica que el 34% tuvo dificultades en la escuela, colegio o universidad, por su rendimiento o conducta.

También se demostró que existe un menor nivel de felicidad y satisfacción en adultos de familias fragmentadas, y el 29% de estas familias indicó haber presentado problemas emocionales o psicológicos, a diferencia del 13% de las familias no fragmentadas que reportaron estos mismos padecimientos.

Asimismo, se evidenció que el 13% de los adolescentes de familias fragmentadas habían fumado más de una vez al mes y un 11% se han embriagado más de una vez al mes, mientras que en las familias que no reportaron ningún miembro que haya migrado este porcentaje es del 6% y 3%, respectivamente.

Por su parte Rolando Sierra, director de Flacso-Honduras, explicó que este estudio forma parte de una serie de trabajos que se han venido realizando desde hace varios años, enfocados en las migraciones, con el apoyo del proyecto Eurolabor, que ha financiado estas investigaciones que se estarán presentado todos los martes, a partir de hoy y hasta el 21 de julio.