La pandemia por el COVID-19 ha obligado a millones de ciudadanos de todo el mundo a utilizar guantes, mascarillas o materiales de protección, los cuales son desechados, por lo que debe existir un correcto manejo de estos y así evitar la posible propagación del virus.

Para el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, los gobiernos deben considerar la gestión de residuos un servicio público urgente y esencial en el marco de la pandemia del COVID-19, con el fin de minimizar posibles impactos secundarios sobre la salud y el medio ambiente. Las medidas de gestión deben considerar todos los tipos de residuos, incluidos los médicos, domésticos y peligrosos.

La gestión eficaz de los desechos biomédicos y hospitalarios requiere de un proceso apropiado de identificación, recolección, separación, almacenamiento, transporte, tratamiento y eliminación de los residuos, así como de aspectos asociados importantes que incluyen la desinfección, la protección y capacitación del personal.

En el caso de Honduras, existe un Reglamento para el manejo de los desechos peligrosos generados en los establecimientos de salud, el cual regula las operaciones de manejo de estos desechos que se categorizan en comunes, peligrosos y especiales.

Para el manejo interno de los desechos deben cumplirse los siguientes procedimientos:

• Segregación.
• Almacenamiento intermedio.
• Recolección y transporte interno.
• Almacenamiento temporal.

Mientras que para el manejo externo debe llevarse a cabo la recolección y transporte externo, el tratamiento y la disposición final que se refiere a la operación final controlada y ambientalmente adecuada de los desechos sólidos según su naturaleza.

Desechos domésticos

Los guantes, las mascarillas o los medicamentos caducados son desechos médicos que también se pueden generar en el ámbito del hogar y estos pueden mezclarse fácilmente con la basura doméstica, por lo que deben tratarse como desechos peligrosos y eliminarse por separado.

En ese sentido, el programa de la ONU recomienda almacenarlos aparte de otros flujos de residuos domésticos y ser recolectados por operadores municipales u operadores de gestión de residuos especializados.

Convenio de Basilea

El Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación es el acuerdo ambiental internacional más completo sobre desechos peligrosos y otros desechos, y es casi universal, ya que cuenta con 187 partes.

Su objetivo es proteger la salud humana y el medio ambiente contra los efectos adversos de los desechos peligrosos y otros desechos. En la actualidad trabajan en un documento de orientación para el manejo racional de los residuos domésticos y, aunque todavía no lo han finalizado, puede consultar el borrador inicial para obtener orientación provisional.

Asimismo, cuenta con las pautas sobre las especificidades del reciclaje o la eliminación de dichos desechos, las cuales se detallan en la hoja de datos del Convenio de Basilea sobre los residuos médicos y hospitalarios, a la que pueden acceder haciendo clic aquí.