Por Ricardo Andino
En 2019, la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) instaló la primera red sísmica experimental del país. Esta red ha permitido durante los últimos años identificar las zonas más vulnerables a los sismos y predecir la magnitud de estos eventos para mitigar su impacto. En la actualidad cuenta con 20 sismógrafos instalados en centros regionales y CRAED, diseminados en casi todo el territorio nacional y existen planes de ampliarla a la Moskitia e Islas de la Bahía, según información brindada en la Facultad de Ciencias.
El equipo de monitoreo fue adquirido como parte del Proyecto Regional Riesca, enfocado en la formación aplicada a los escenarios de riesgos y la vigilancia de fenómenos volcánicos, sísmicos e hidrogeológicos en Centroamérica.
Cabe recordar que este proyecto fue financiado por la Cooperación Italiana e implementado con fondos propios de la UNAH.
Foto de las instalaciones en donde funciona el sismógrafo de UNAH-CURC, Comayagua.
El jefe de la Unidad de Geología y Geofísica del Instituto Hondureño de Ciencias de la Tierra (Ihcit), Manuel Rodríguez, informó que ya cuentan con 20 sismógrafos en diferentes centros universitarios, telecentros y CRAED. Este año se buscará cubrir las zonas de Islas de la Bahía y de La Moskitia.
Olancho
Por otra parte, Rodríguez compartió una imagen en donde se muestra la actividad sísmica del terremoto sucedido en Gualaco, Olancho el pasado lunes en horas de la madrugada.
Rodríguez destacó que, aunque la red ha sido implementada con fines académicos, el Ihcit colabora estrechamente con los expertos del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), con el propósito de suministrar información que contribuya a la protección de la vida humana y de los bienes.
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