Daniela Martínez, UNAH-Tec Danlí

Jongho Kim, originario de Corea del Sur, encontró en Honduras un destino inesperado para sus estudios superiores. Trabajando previamente como importador y distribuidor de granos de café verde junto a su familia en Corea, Jongho se embarcó en una aventura que lo llevó a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) para especializarse en el Técnico Universitario en Administración de Empresas Cafetaleras (TUAEC).

La motivación de Jongho para elegir esta carrera surgió durante su primera visita a Honduras, donde conoció a la familia de un amigo y a la exdirectora de UNAH-Tec Danlí, máster Carla Garcés. Esta conexión lo llevó a descubrir la nueva carrera que se estaba ofertando en el centro, una centrada en el café, y sin dudarlo, decidió matricularse. Él expresa su eterno agradecimiento a la máster Garcés y al director Jaime Valerio, así como a todas las personas que lo apoyaron durante su estancia.

Adaptarse a un nuevo país, cultura e idioma no fue tarea fácil para Jongho. A pesar de haber aprendido español antes de su llegada, enfrentó desafíos para acostumbrarse a la vida hondureña. Sin embargo, gracias al apoyo de quienes lo rodeaban, logró integrarse y disfrutar de su nueva vida en Honduras.

Uno de los aspectos más sorprendentes para Jongho fue descubrir que, a pesar de las noticias negativas que había escuchado sobre el país, la vida cotidiana no era tan diferente a la de Corea. Esta realización le permitió derribar barreras y prejuicios, facilitando su adaptación y aprecio por la cultura local.

Durante su tiempo en el TUAEC, Jongho no solo se dedicó a las clases formales, sino que también participó en cursos de barismo, donde trabajó como instructor. Estas experiencias, junto con visitas a otras regiones cafetaleras y proyectos prácticos, enriquecieron su formación y le brindaron una visión única del sector cafetalero.

Una de sus experiencias más memorables fue la reunión internacional, en febrero de 2020, con profesores y estudiantes de la Universidad de Artes Baekseok en Seúl y miembros de la Academia de Café de Los Ángeles. Este encuentro, que reconoció globalmente el valor de su carrera, fue un momento conmovedor y significativo en su trayectoria.

El apoyo recibido por sus compañeros, profesores y la comunidad fue fundamental para Jongho. Este respaldo le permitió construir una red de contactos que aspira a expandir globalmente en el futuro.

Comparando el sistema educativo de Corea y Honduras, Jongho destaca la facilidad de ingreso en comparación con Corea, pero subraya el arduo trabajo para graduarse, especialmente superando la barrera del idioma.

Para Jongho Kim, Honduras no solo ha sido un lugar de aprendizaje académico, sino una experiencia transformadora que ha ampliado sus horizontes y le ha proporcionado herramientas para su futuro en la industria cafetalera.