Máster Jesús De Las Heras, UNAH

El 9 de octubre conmemoramos el nacimiento de Dionisio de Herrera; notable conocedor de la literatura política de su tiempo, prócer de la independencia de Honduras y personaje relevante para la sociedad y cultura centroamericana.

Nacido el 9 de octubre de 1781, fue bautizado como José Dionisio de la Trinidad de Herrera y Díaz del Valle, en la iglesia parroquial de la Villa de Choluteca; cuando Honduras era aún una provincia que pertenecía a la Capitanía General de Guatemala (cuyo gobierno comprendió toda la región centroamericana) hasta el momento de la independencia. Falleció el 13 de junio 1850 en El Salvador.

Dionisio de Herrera fue un abogado que hizo sus estudios en la Universidad de San Carlos de Guatemala y que posteriormente participó en diversos escenarios de la vida política centroamericana.

Para el momento en que se declaró la independencia en 1821, Dionisio de Herrera ya era un prominente abogado de 39 años de edad que se desempeñaba como secretario del Ayuntamiento de Tegucigalpa. Con la llegada de los pliegos de independencia el 28 de septiembre de 1821, le tocó redactar el acta conocida como “Viva la Independencia” en que se hacía constar la lealtad de la Villa de Tegucigalpa a la Junta Consultiva de Guatemala y la aceptación de la independencia centroamericana.

Posteriormente fue elegido como primer jefe de Estado de Honduras por la Asamblea Constituyente reunida en la ciudad de Cedros; en su gestión política proclamó la primera Constitución Política, se creó la primera división territorial de Honduras y el escudo de armas; en su gestión gubernamental también se procuró alimentar el conocimiento de las leyes y la democracia a través de las “Tertulias Patrióticas” (decretadas el 15 de abril de 1826), como espacios dedicados al estudio y debate ante autoridades departamentales y locales que permitieran inculcar la ilustración política en la sociedad a inicios de la vida independiente del siglo XIX.

Al revisar los libros de historia de nuestro país, no siempre se encuentra mención de este personaje, ni de su papel beligerante como prócer independentista y como autor de la Constitución Federal Centroamericana que redactó junto a su primo y también abogado José Cecilio del Valle.

Dichosamente, el papel moneda emitido por el Banco Central de Honduras en su billete de veinte lempiras le brinda reconocimiento permanente, al mostrar el busto de Dionisio de Herrera y su cargo como Jefe del Estado de Honduras a partir de 1824; como parte del primer sistema de gobierno postcolonial que se estableció en la región centroamericana, cuya capital fue Guatemala, en tanto que las antiguas provincias del istmo pasaron a ser estados federales.

Desde la UNAH es motivo de orgullo el poder reconocer la contribución realizada por Dionisio de Herrera a la sociedad centroamericana, en un permanente rescate de valores esenciales que pueden y deben ser inculcados en las futuras generaciones de profesionales y como una contribución a la continuación de esfuerzos en favor del bienestar de toda la sociedad a través del fomento de la cultura y la educación. Como sugiere el Programa prioritario Lo Esencial de la Reforma Universitaria debemos fortalecer en nuestra comunidad de estudiantes la ética, identidad, cultura y ciudadanía, aspectos sobradamente destacados en la obra de Dionisio de Herrera.