¿Qué es una patente y qué se puede proteger con ella?
Comprender las patentes es esencial para cualquier investigador, inventor o emprendedor. Aunque el término “patente” es cada vez más común, su verdadero alcance sigue generando confusión. Este artículo explica de manera clara qué es una patente, qué protege, qué no protege y por qué es fundamental en la gestión de la innovación.
1. ¿Qué es una patente?
Una patente es un derecho exclusivo concedido por el Estado que protege una invención, ya sea un producto o un procedimiento, que ofrece una solución técnica nueva y útil a un problema.
En Honduras, la patente está regulada por el Decreto Legislativo 12-99-E, Ley de Propiedad Industrial, que otorga al inventor la posibilidad de impedir que terceros fabriquen, usen o comercialicen su invención sin autorización, dentro del territorio nacional y por un tiempo limitado (20 años desde la fecha de solicitud).
Este sistema no solo reconoce el esfuerzo creativo del inventor, sino que incentiva la innovación tecnológica, promueve la transferencia de conocimiento y contribuye al desarrollo económico.
2. Lo que no puede protegerse mediante patente
No todo lo novedoso o creativo entra en la categoría de “invención”. La ley hondureña excluye expresamente ciertos objetos y actividades, ya sea porque pertenecen a otras ramas de la propiedad intelectual o porque su protección contravendría el interés público.
No son patentables:
- Obras literarias, artísticas o científicas, que se protegen mediante el derecho de autor.
- Marcas, lemas y nombres comerciales, que cuentan con su propio régimen de registro.
- Variedades vegetales y razas animales, que tienen legislación específica.
- Descubrimientos o hallazgos de fenómenos naturales o elementos preexistentes en la naturaleza.
- Materias excluidas por la ley, entre ellas:
- Material biológico natural y descubrimientos científicos.
- Métodos de tratamiento terapéutico, quirúrgico o de diagnóstico aplicados al cuerpo humano o animal.
- Procesos biológicos esencialmente naturales para la producción de plantas o animales.
(Artículos 5 y 7 del Decreto Legislativo 12-99-E).
3. Lo que sí puede protegerse con una patente
La ley define la invención como:
“Toda creación humana que permita transformar la materia o la energía que existe en la naturaleza, para su aprovechamiento, a través de la satisfacción inmediata de una necesidad concreta. Una invención podrá ser de producto o de procedimiento.”
(Artículo 4, Decreto Legislativo 12-99-E).
Esto significa que una invención es una solución técnica concreta a un problema técnico, creada por intervención humana y susceptible de aplicarse en la industria.
Ejemplos comunes de invenciones patentables incluyen nuevos materiales, dispositivos mecánicos, formulaciones químicas, procesos industriales o mejoras técnicas en productos existentes.
4. Los tres requisitos de patentabilidad
Para que una invención sea protegible por patente, debe cumplir con tres condiciones esenciales:
- Novedad mundial:
La invención no debe haber sido divulgada en ninguna parte del mundo antes de la fecha de presentación. Si ya fue publicada o expuesta públicamente, pierde novedad. - Actividad inventiva:
La solución no debe resultar obvia para una persona con conocimientos técnicos en el área. Por ejemplo, agregar un motor a una bicicleta para que sea más rápida no sería inventivo, pues es una conclusión previsible. - Aplicación industrial:
La invención debe poder fabricarse o utilizarse en cualquier sector industrial. La mera apariencia estética o decorativa no es suficiente, a menos que aporte una función técnica (por ejemplo, una carcasa de teléfono que disipe mejor el calor o proteja la pantalla al caer).
5. Alcances y límites del derecho de patente
- No es una autorización comercial.
La patente no sustituye los permisos sanitarios, ambientales o de seguridad que otras autoridades puedan requerir.
Tampoco es la única forma de proteger una innovación: en algunos casos, el secreto industrial puede ser una alternativa más conveniente. - No es una garantía de exclusividad automática.
El titular de la patente debe vigilar activamente el mercado y ejercer acciones legales contra infractores; el Estado no lo hace de oficio. - No excluye la competencia.
Otros pueden desarrollar soluciones diferentes para resolver el mismo problema técnico sin infringir la patente. - Es un activo intangible negociable.
La patente es un título jurídico de propiedad, que puede licenciarse, venderse o utilizarse como garantía, generando valor económico y atrayendo inversión.
6. Conclusión
Una patente no es solo un documento técnico: es una herramienta estratégica para transformar la creatividad en valor económico y social.
Comprender su alcance y limitaciones permite a inventores, investigadores y emprendedores decidir cuándo y cómo proteger sus creaciones, aprovechando al máximo los beneficios que el sistema de propiedad intelectual ofrece.
¿Tienes una idea innovadora o un proyecto de investigación en desarrollo?
Consulta a la Dirección de Investigación Científica, Humanística y Tecnológica (DICIHT-UNAH) para recibir orientación sobre cómo proteger tu invención o solicitar apoyo para el registro de tu patente.
???? Proteger tu creatividad es el primer paso para transformar la innovación en desarrollo.
Referencias legales y técnicas
- Ley de Propiedad Industrial de Honduras, Decreto Legislativo N.º 12-99-E.
- Reglamento de la Ley de Propiedad Industrial, Acuerdo Ejecutivo N.º 000-2000.
- Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) – Guía de Patentes para Inventores.
- Comunidad Andina – Decisión 486: Régimen Común sobre Propiedad Industrial.
- OMC – Acuerdo sobre los ADPIC (Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio).



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